martes, 29 de junio de 2010

Pérdidas en licoreras por restricción llegan al 60%

Lunes 28 de junio del 2010

Intranquilos y alarmados se sienten los propietarios de algunas licoreras de Guayaquil por las pérdidas económicas y la posibilidad de prescindir de todos sus empleados ante la restricción de la venta de bebidas alcohólicas los domingos y la disminución de dos horas diarias de lunes a sábado.

La medida, que rige desde el pasado 18 de junio, se la creó según el Gobierno para disminuir los índices delictivos, asesinatos y accidentes de tránsito.

Para los dueños de licoreras como La Baratita, ubicada en la av. Isidro Ayora (al norte), los horarios establecidos, que solo les permite expender licor hasta las 22:00 de lunes a sábado, le han dejado hasta el momento pérdidas que superan el 60%, asegura Dagoberto Vargas. Esto ha hecho que incluso despida a dos de sus tres empleados.

“Debo cheques a los proveedores. No sé cómo pagar porque en las licoreras vendemos desde las 22:00 en adelante. En las tardes nadie nos compra ni colas ni aguas porque prefieren las tiendas de barrio más cercanas”, explica Vargas.

Con él coincide Pilar de Velásquez, propietaria de la licorera El Búho, ubicada en la calles José de la Cuadra y avenida 25 de Julio (al sur), quien acota que además de las pérdidas económicas del 60% está desesperada porque no sabe cómo pagar las planillas de luz, agua y teléfono, pues este negocio es su único sustento.

“Mi esposo y yo, que somos de la tercera edad, solo vivimos de esto. ¿Quién nos contrata en otro empleo a esta edad?”, manifiesta la mujer, que también tuvo que despedir a uno de sus empleados.

Otros, como Jeannina Andrade, representante de otras 40 licoreras y minimarkets de la urbe, aún no han hecho nuevos pedidos a los proveedores porque todavía tienen la mercadería que adquirieron para las fiestas por el Día del Padre, primer domingo que no pudieron atender a los clientes.

“Nuestras ventas son a partir de las 22:00 cuando cierran los comisariatos y centros grandes. Ahí, quienes se quedan sin licor llegan a nuestros locales. Todos en promedio llevamos un 70% de pérdidas”, relata Andrade.

Ella y los demás dueños de licoreras esperan que el gobierno central atienda el pedido que les plantearon por escrito el pasado martes, donde sugieren que les permitan vender licor hasta las 24:00 de lunes a jueves; viernes y sábado hasta las 02:00 y domingo hasta las 18:00. En el comunicado enfatizan que se deberían priorizar las campañas para concienciar sobre el consumo del alcohol y sus consecuencias.

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